¿Quienes somos?

backpacks of Boy Scouts around the tree during an excursion in the nature park 2

Algo más que ocio y tiempo libre
Los grupos scouts se reúnen, normalmente, los sábados y organizan actividades y talleres de todo tipo. Pero son algo más que un grupo de animación infantil. Lejos de todos los tópicos, los monitores Scouts buscan con cada actividad educar en valores basados en los principios del humanismo cristiano.

En una sociedad en la que las nuevas tecnologías y la instantaneidad están a la orden del día, parece complicado enseñar a los niños a vivir de otra forma. Es difícil educarlos en la austeridad, la generosidad y el respeto o enseñarles a compartir, sin embargo, en los scouts los niños aprenden a trabajar en equipo, a cooperar con los demás, respetar la naturaleza y a buscar su propio camino.

Gracias a las actividades que se proponen cada semana y al trabajo en equipo, aprenden la importancia de colaborar y lo lejos que se puede llegar.

Así, los Scout no sólo son una fuente inagotable de diversión o un lugar de ocio alternativo, también son una propuesta de educación en valores y de crecimiento personal, donde el papel de los padres es muy importante y donde el diálogo y el respeto son elementos fundamentales.

La clave está en el “espíritu scout”, que cada niño descubra la importancia de la naturaleza, el compañerismo y la lucha por ser cada día mejores como forma de vida. Por eso, entre otras cosas, los scouts se comprometen a hacer cada día una buena acción y “dejar el mundo en mejores condiciones que lo encontraron”.

Cada grupo Scout se divide en subgrupos según la edad. Cada uno con un color y con una dinámica diferente. Poco a poco los niños van asumiendo pequeñas responsabilidades, ya que una de las normas scouts es que “el grande protege al débil”, y a medida que crecen han de ayudar a los más pequeños y “ser un ejemplo”.

Nuestros colores son Azul Marino y Fucsia

Los más pequeños son los Castores, niños de 6 y 7 años que, guiados por sus monitores y su imaginación, descubrirán los secretos del bosque.
La Manada, niños de entre 8 y 11 años, viven mil aventuras de la mano de los personajes del cuento de “El Libro de la Selva” y aprenden a escuchar los sonidos que se esconden en la Selva, siempre intentando ayudar a los demás. En cada acampada descubrirán estrellas y jugarán hasta caer rendidos al anochecer.

La Tropa, niños hasta 13 años, empiezan a asumir responsabilidades y a descubrir el mundo sin dejar de jugar. Realizan actividades multiaventura, orientación en la naturaleza, construyen refugios…

Cumplidos los 14 años, los chicos y chicas comienzan a trabajar en la Unidad Esculta. Elaboran sus propios proyectos, abiertos al servicio comunitario, se abren a la sociedad y afianzan su pertenencia y su responsabilidad ciudadana.

Los Rovers son los más mayores. Es una etapa difícil, en la que la educación en valores adquiere más importancia. Por eso, en los grupos scouts, siguen planteando actividades para que descubran en el servicio a la sociedad una forma de vida.

Los Scouters, mayores de 21 años, son voluntarios que desempeñan tareas educativas y/o de gestión en el grupo o sección, inculcando y trabajando con los valores Scouts.

Secciones en activo

Actualmente el Grupo Scout Alba 601 cuenta con tres secciones en activo (Manada, Tropa y Esculta), dirigidas y organizadas por un kraal de Scouters.

SUBIR